El pasado 6 de febrero del 2023 la Dirección General de la Agencia Estatal de Administración Tributaria publicó una resolución donde se aprueban las directrices generales del Plan Anual de Control Tributario y Aduanero de 2023.
Como novedades destacadas encontramos:
- Un mayor control sobre ciudadanos residentes en España que declarar sus rentas a través del Impuesto sobre la Renta de No Residentes, rebajando artificialmente su factura fiscal. También se incide en el control de los supuestos de residencia en CCAA diferentes a la real, así como el control de titularidad indirecta de inmuebles por parte de no residentes.
- Implantación de un nuevo modelo de información y asistencia con una carta completa de los servicios y canales disponibles, junto con una nueva aplicación de cita previa.
- Revisión de procedimientos sancionadores, en especial aquellos casos de presentaciones fuera de plazo que no ocasionen perjuicio económico a la Administración tributaria.
- Refuerzo de actuaciones en relación con actividades económicas que emplean métodos electrónicos de pago radicados en el extranjero, así como la potenciación de actuaciones de localización de criptomonedas susceptibles de embargo.
- Intensificación del control sobre los riesgos fiscales que se derivan de la incorrecta fijación de los precios de las operaciones vinculadas en las multinacionales.
- Se reforzará el control sobre sectores y modelos de negocio en los que se aprecie alto riesgo de existencia de economía sumergida. Así, se impulsarán las tradicionales visitas o ‘peinados’ fiscales en relación con múltiples sectores, aunque con un enfoque especial a las actividades relacionadas con la construcción, rehabilitación y reformas de inmuebles.
- Eliminar el aprovechamiento indebido de créditos fiscales mediante la comprobación de bases imponibles negativas, créditos fiscales en base o cuota pendientes de compensar o de aplicar.
- Control del fraude en fase recaudatoria mediante el refuerzo de la cooperación internacional para el cobro de créditos tributarios mediante una mayor explotación de los intercambios de información con otras administraciones y el perfeccionamiento de herramientas que permitan realizar una selección de deudores con signos de riqueza en el exterior, especialmente en el ámbito de la UE.
- Se prioriza la toma de medidas cautelares para evitar vaciamientos patrimoniales, la adopción de derivaciones de responsabilidad para afianzar el cobro efectivo de las deudas, o la vigilancia de los deudores condenados por delito.